Receta con coliflor y rebozuelo: un plato de temporada
Si eres aficionado a las setas, sabrás que el rebozuelo (o chantarela) es una de las especies más resistentes y versátiles. En mi zona, la provincia de Cádiz y Málaga, concretamente en el Parque Natural de los Arcornocales, he podido recolectar chantarelas desde el 1 de noviembre hasta mediados de abril. ¡Seis meses seguidos disfrutando de esta seta única!
Este año ha sido especialmente llamativo porque, a finales de marzo y principios de abril, prácticamente la única seta visible en el campo era la chantarela. Entre las variedades que he encontrado, destacan la Chantarellus cibarius y la Chantarellus subpruinosus, de la que ya os he hablado en este artículo sobre la chantarela en Andalucía. Con toda esta chantarela por delante, no me ha quedado más remedio que ponerme creativo en la cocina e invertarme algunos platos nuevos. Tirando con lo que tenía por casa, creé este plato a base chantarelas y coliflor que os dejo por aquí.
Ingredientes para la receta
- Rebozuelos frescos (chantarelas)
- Coliflor
- Ajo
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta al gusto
- Hierbas aromáticas del huerto (opcional)
Preparación paso a paso
- Limpia los rebozuelos con cuidado, eliminando restos de tierra con un pincel o paño húmedo.
- Corta la coliflor en ramilletes pequeños y lávala bien.
- Sofríe el ajo en una sartén con aceite de oliva a fuego medio.
- Añade los rebozuelos y saltéalos hasta que estén dorados.
- Incorpora la coliflor y cocina hasta que esté tierna pero crujiente.
- Rectifica de sal y añade hierbas frescas si lo deseas.
¿Por qué combinan tan bien coliflor y rebozuelo?
La textura carnosa de los rebozuelos y su sabor ligeramente afrutado contrastan perfectamente con el dulzor suave de la coliflor. Además, ambas son ingredientes de temporada en ciertas épocas del año, lo que hace este plato aún más especial.
Conclusión: ¡Anímate a probarlo!
Esta receta con coliflor y rebozuelo es sencilla pero llena de sabor, perfecta para disfrutar de las setas silvestres. ¿Has probado alguna vez esta combinación? ¿Tienes alguna variante que quieras compartir? ¡Déjanos tu comentario y cuéntanos tu experiencia con las chantarelas!